La otra noche, mientras Ana estaba acostada cual larga es en el sillón de la sala de la casa, me preguntó:
- Porque aunque no estamos aquí en todo el día, en las noches llegas y haces quehacer mami? No hay nadie que ensucie….
Ella tiene razón…no hay nadie que ensucie realmente…pero me gusta mantener mi casa sumamente ordenada y limpia para mi..y para ella. Prefiero invertir 30 minutos cada noche en limpiar los muebles rápidamente, tirar basura del baño, dar una barrida de arriba hacia abajo y una trapeada también y luego ya en paz, sentarme a leer un buen libro…o a jugar con los gatitos, o simplemente sentarme en silencio, cómoda y tranquila. No necesito contratar a una persona que vaya y la limpie; no me asusta si me cae visita imprevista; no me da vergüenza que los amigos y amigas de Ana entren, porque todo esta en orden. Las pocas vecinas a quienes les he permitido entrar a mi casa, siempre tienen comentarios positivos sobre la limpieza, el orden y la paz que se respira dentro….y me gusta conservar mi casa así.
Eso mismo es con nuestra mente. Si todos los días, le dedicamos unos pocos minutos, podemos evitar tener que contratar a alguien que venga a limpiarla por nosotros (Psicólogos o Psiquiatras) si todos los días nos tomamos un poco de tiempo para limpiarla de todo el mugrero que pudimos haber recogido durante el día, el esfuerzo realmente será mínimo. Si dejamos caer nuestra mente en pensamientos negativos durante años y años…sin ponerle atención, tomará mucho más tiempo y esfuerzo limpiarla.
Como se limpia la mente? Leyendo buenos libros, escuchando buena música, meditando, orando, haciendo afirmaciones. Tal vez al inicio el cambio no sea tan patente, pero conforme pase el tiempo, te darás cuenta que valió la pena, ya que la gente del exterior va a poder ver los resultados que una mente limpia y en orden tiene.
Tal vez ahorita te parezca muy pesado realizar un cambio; pero es como si tuvieras una casa sucia de años…inicia con una pequeña habitación…y luego otra..y luego otra..y cuando menos lo esperes…el cambio será evidente.
- Porque aunque no estamos aquí en todo el día, en las noches llegas y haces quehacer mami? No hay nadie que ensucie….
Ella tiene razón…no hay nadie que ensucie realmente…pero me gusta mantener mi casa sumamente ordenada y limpia para mi..y para ella. Prefiero invertir 30 minutos cada noche en limpiar los muebles rápidamente, tirar basura del baño, dar una barrida de arriba hacia abajo y una trapeada también y luego ya en paz, sentarme a leer un buen libro…o a jugar con los gatitos, o simplemente sentarme en silencio, cómoda y tranquila. No necesito contratar a una persona que vaya y la limpie; no me asusta si me cae visita imprevista; no me da vergüenza que los amigos y amigas de Ana entren, porque todo esta en orden. Las pocas vecinas a quienes les he permitido entrar a mi casa, siempre tienen comentarios positivos sobre la limpieza, el orden y la paz que se respira dentro….y me gusta conservar mi casa así.
Eso mismo es con nuestra mente. Si todos los días, le dedicamos unos pocos minutos, podemos evitar tener que contratar a alguien que venga a limpiarla por nosotros (Psicólogos o Psiquiatras) si todos los días nos tomamos un poco de tiempo para limpiarla de todo el mugrero que pudimos haber recogido durante el día, el esfuerzo realmente será mínimo. Si dejamos caer nuestra mente en pensamientos negativos durante años y años…sin ponerle atención, tomará mucho más tiempo y esfuerzo limpiarla.
Como se limpia la mente? Leyendo buenos libros, escuchando buena música, meditando, orando, haciendo afirmaciones. Tal vez al inicio el cambio no sea tan patente, pero conforme pase el tiempo, te darás cuenta que valió la pena, ya que la gente del exterior va a poder ver los resultados que una mente limpia y en orden tiene.
Tal vez ahorita te parezca muy pesado realizar un cambio; pero es como si tuvieras una casa sucia de años…inicia con una pequeña habitación…y luego otra..y luego otra..y cuando menos lo esperes…el cambio será evidente.
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